Equipo Aguas Urbanas: Instituto de Teoría de la Arquitectura y Urbanismo (ITU)
Grupo de Gestión Integral del Riesgo (GGIR)
Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (CECOED)
La ciudad de Durazno (33.500 habitantes), ubicada sobre la margen izquierda del río Yi, ha estado marcada por recurrentes eventos de inundación que han caracterizado su desarrollo urbano y la relación de su población con el río.
En particular en los años 2007 y 2010 se registraron dos eventos extremos que implicaron la evacuación de más de 6 mil personas e impactos significativos en la sociedad local.
Las inundaciones de 2007 (que afectaron también las ciudades de Treinta y Tres y Mercedes), propiciaron el involucramiento de la Universidad de la República (UdelaR) en diferentes instancias de trabajo coordinadas con el Sistema Nacional de Emergencias.
A partir de entonces, el equipo de Aguas Urbanas del Instituto de Teoría de la Arquitectura y Urbanismo (ITU - UdelaR) y el Grupo de Gestión Integral del Riesgo (GGIR - equipo interdisciplinario que funciona en la órbita del Pro-rectorado de Extensión de la UdelaR), dieron comienzo a un trabajo conjunto con los gestores locales en la ciudad de Durazno que se ha mantenido en el tiempo, teniendo momentos significativos en particular en el evento de 2010. En particular se caracterizó la vulnerabilidad socio-habitacional del área inundada, georreferenciando la información y generando insumos desde el ordenamiento territorial para la optimización de la respuesta.
Estos años de trabajo conjunto han permitido articular las visiones de la academia con la de los gestores locales, enriqueciendo ambas, en el proceso de gestión integral del riesgo.
2010 – Inundaciones en Durazno. Caracterización socio-habitacional del área inundable. Trabajo de campo.
2011 – 12 – Procesamiento de información
2013 – Presentación pública de resultados. Actividad de extensión “sobre el agua”
Por otra parte a nivel local, desde el año 1977 (actualizada en 1982) existe una ordenanza que regula las construcciones en las zonas inundables, no existiendo al momento de la inundación de 2007 un Plan de Ordenamiento Territorial (actualmente en proceso de elaboración). Esto se constituye en una debilidad al momento de la gestión de los territorios en riesgo de inundación.
En la ciudad funciona un Centro Coordinador de Emergencias que posee experiencia fundamentalmente vinculadas a la etapa de respuesta y recuperación, aunque cuenta con restricciones en cuanto a recursos humanos capacitados.
Su objetivo en lo que hace a las inundaciones urbanas es:
-Analizar invariantes y particularidades territoriales de las zonas inundables y brindar elementos para orientar las estrategias de acción en el marco de políticas de ordenamiento territorial que propicien el desarrollo local y optimicen una distribución eficiente de los recursos humanos y materiales
En particular, la experiencia en Durazno tuvo como objetivos:
-Dar insumos para la incorporación de medidas de prevención a la gestión del riesgo.
-Dar elementos a los gestores tendientes a un conocimiento más profundo e información sistematizada de la zona afectada
-Generar un ámbito de intercambio con la comunidad local, dando a conocer lo elaborado por el equipo de investigación y poner a consideración los aportes surgidos del intercambio
En la inundación 2010 se relevó el área inundable (más de 1000 viviendas y 3000 personas) por parte de voluntarios universitarios y locales, coordinado por el GGIR.
Esta información se sistematizó y territorializó, siendo insumo de informes sobre la situación, algunos de los cuales se articularon con el desarrollo del Plan Local.
El cierre de esta etapa fue la exposición interactiva en Plaza Sarandí para comunicar a la población en general los productos del trabajo.
-Recursos presupuestales del equipo de investigación (Farq-UdelaR)
-Servicio Central de Extensión y Actividades en el Medio (SCEAM-UdelaR) - fondos para el desplazamiento de los relevadores en ocasión de la inundación de 2010.
-Organización Meteorológica Mundial (OMM), Proyecto Piloto de Alerta Temprana para la ciudad de Durazno. Componente 3 en el marco de la Red PROHIMET.
-Convenio Facultad de Arquitectura- Intendencia de Durazno- apoyo al procesamiento de la información.
-Facultad de Arquitectura- Llamado interno a proyectos de extensión 2012 para la difusión de los productos del relevamiento.
-Procesamiento y sistematización de la información relevada como insumo base para el análisis del área.
-Georreferenciación de la información con desagregación por vivienda. La misma fue utilizada por tomadores de decisión locales en el proceso de gestión de riesgos e incluso fue insumo para la elaboración del Mapa de riesgos y el Plan Local
-Informe de evaluación de zonas inundables, indagando en particularidades que condiciones modalidades de gestión, tanto por recurrencia del evento como por barrio
-Aporte desde lo territorial al sistema de alerta temprana (sistema de aviso primario puesto en marcha por el IMFIA en el marco de convenio con OMM-Prohimet)
-Exposición de paneles de información y trabajo con mapa interactivo en la Plaza Sarandí con la participación de más de 100 personas. Se elaboró blog para difusión de la misma. En el trabajo participaron estudiantes de la licenciatura de Comunicación visual.
Asimismo, los cinco años de trabajo conjunto han consolidado un buen vínculo institucional y personal entre los técnicos universitarios y los de la intendencia Departamental, en particular del Centro Coordinador.
Desde el ámbito universitario, se continúan desarrollando trabajos específicos e n la materia como ser diversos proyectos de grado de Facultad de Ingeniería con tutoría del equipo del ITU.
El Grupo de Gestión Integral del Riesgo (equipo interdisciplinario de la UdelaR) se constituye en un ámbito propicio para asegurar la sostenibilidad a futuro.
- La complejidad de los procesos asociados a la gestión del riesgo ameritan la amplia participación de saberes y actores (técnicos, políticos y sociales).
- El manejo de información desagregada a escala de vivienda permite diseñar estrategias de actuación adecuadas a las diferentes realidades locales.
Desde el equipo universitario, la articulación de estas posibles demandas con la caja instrumental y metodológicas disciplinares permitirían dar respuestas a las mismas.